¿Cuándo y cómo aplicar protector solar en tu rutina de cuidado de la piel?

Aprende cuándo debes utilizar el mejor protector solar según dermatólogos en tu rutina: orden, cantidad y los consejos de reaplicación para garantizar una protección óptima.

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¿Cuándo y cómo aplicar el protector solar en tu rutina de skincare?

El uso diario de protección solar es una parte importante de tu rutina y va mucho más allá de la simple prevención frente a las quemaduras solares que pueda provocar la exposición al sol. De hecho, el protector solar desempeña un papel esencial en la protección de la piel frente a los daños causados por los rayos UV, pero eso no es todo. Los protectores solares ofrecen ahora otros beneficios, como la protección frente a las agresiones medioambientales como el sol y la contaminación, o pueden ayudar a la piel a hacer frente a patologías cutáneas (acné, exceso de sebo, rojeces...).

¡Descubre cómo utilizar tu crema solar a diario para una protección óptima!

Los productos de protección solar protegen la piel contra los rayos UV. Hay dos tipos, con efectos superpuestos en la piel:

- Rayos UVB, que afectan las capas superficiales de la piel, causando quemaduras solares y riesgo de desarrollar cáncer de piel.

- Rayos UVA, que penetran profundamente en la piel, causando fotoenvejecimiento y riesgo de desarrollar cáncer de piel. Estos causan arrugas, flacidez de la piel y la aparición de manchas de pigmentación.

El sol contiene otros tipos de radiación que también son perjudiciales para la piel: la luz visible y la radiación infrarroja. Al igual que los rayos UVA, la luz visible y la radiación infrarroja atraviesan las nubes y las ventanas, infligiendo daños silenciosos en la piel día tras día, lo que lleva al fotoenvejecimiento.

Aunque el sol es beneficioso para el cuerpo: la producción de vitamina D, la mejora del estado de ánimo, la exposición repetida o prolongada sin protección es peligrosa para la salud de la piel, por lo que puede tomar medidas para proteger su piel. También es importante saber que las radiaciones solares están presentes en todas las estaciones, no solo en verano.

Protegerlo es la clave para una piel sana.

Hay dos categorías de protector solar: químico y mineral. Cada uno tiene sus propias características y beneficios. Cualquiera que sea la protección que elija, es importante que forme parte de su rutina diaria para proteger su piel del daño de los rayos UV.

- Protectores solares químicos: Esta categoría de protectores solares absorbe los rayos UV. Los protectores solares químicos ofrecen productos de textura ligera con un acabado más invisible que los protectores solares minerales.

- Protectores solares minerales: Esta categoría de protectores solares está formulada con protectores solares físicos, que reflejan o dispersan los rayos UV. Estos filtros son ideales para piel muy sensible propensa a irritaciones o reacciones alérgicas.

El orden correcto de aplicación

Para aprovechar al máximo tu protección solar, es importante saber cuándo aplicarla como parte de tu rutina. ¿Antes de la crema hidratante? ¿Antes del suero? ¡Te lo contamos aquí!

Recomendamos aplicar protector solar después de la hidratación. La crema hidratante preparará la piel y facilitará la aplicación del protector solar y garantizará una cobertura uniforme. Después de la crema hidratante y el protector solar, ¡tu piel está lista para el maquillaje si lo deseas!

Los sueros generalmente se aplican después de los limpiadores y antes de las cremas hidratantes. Al igual que las cremas y otros productos galénicos, contienen ingredientes activos que se enfocan en problemas específicos (hidratación, manchas, enrojecimiento...).

Por lo tanto, para formar una barrera protectora en la piel a través de la protección solar, es importante que el protector solar se aplique después del suero y la crema hidratante.

Para una rutina minimalista, use un protector solar con acción de cuidado de la piel para aplicar directamente después de la limpieza.

Protector solar con color vs sin color

Cuando se trata de protección solar, es fundamental elegir el producto que mejor se adapte a tus necesidades. Para ello, han aparecido en el mercado productos de protección con y sin color.

Puedes elegir una protección sin color, ideal para dejar tu rostro natural. Alternativamente, puede elegir una protección con color que coincida con su fototipo, para igualar su tez y darle un brillo saludable.

¿Realmente necesitas volver a aplicar protector solar a lo largo del día?

¿Es necesario volver a aplicar protector solar a lo largo del día? La respuesta ideal es sí. De hecho, el protector solar debe volver a aplicarse con frecuencia para mantener una protección efectiva, especialmente después de sudar, nadar o secarse con una toalla.

Para una fácil reaplicación a lo largo del día, opta por fórmulas ligeras que dejen un acabado invisible en la piel, como PHOTODERM XDEFENSE ULTRA FLUID SPF50+

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"Muchas personas aplican el protector solar solo una vez al día o no lo reponen después de nada o sudar. Es necesario reaplicarlo cada 2 horas siempre que estemos expuestos al sol y especialmente después de actividades acuáticas, o sudoración excesiva, etc"

Dra. Alejandra Reolid, Dermatóloga y cocaboradora de BIODERMA

Importancia de la textura del protector solar para tu rutina de cuidado de la piel

A la hora de elegir un protector solar de uso diario, la textura juega un papel crucial en la comodidad y compatibilidad con otros productos de la rutina.

Los protectores solares ultrafluidos parecen ser la textura ideal para la protección diaria, ya que son adecuados para todo tipo de piel y se pueda aplicar fácilmente sobre otros productos para el cuidado de la piel.

Por ejemplo, PHOTODERM XDEFENSE ULTRA FLUID SPF50+ ha sido desarrollado en una formulación galénica ultrasensorial y un tacto ultra seco invisible ideal para una piel de aspecto saludable a diario.

Sus versiones teñidas reemplazarán la base unificando la piel, dando un efecto de brillo saludable y un acabado natural.

Experiencia XDefense

Otros tipos de fórmulas galénicas son adecuadas según sus necesidades y tipo de piel: leches, cremas, geles-cremas... ¡Las posibilidades son infinitas!