Piel debilitada por tratamientos y patologías
Aparte de enfermedades específicas de la piel, la piel puede sufrir los efectos tóxicos de ciertas enfermedades y tratamientos (por ejemplo, diabetes, diálisis, tratamientos para el cáncer, etc.).
Las toxicidades cutáneas comunes incluyen: pérdida de cabello, sequedad extrema de la piel, irritación, problemas con la reparación de la piel, síndrome mano-pie, etc.
Los pacientes a menudo tienen que cambiar sus rutinas de cuidado para proteger su piel y mantener su calidad de vida.